Las pequeñas molestias

Para hacer un proceso de cambio personal o laboral, se necesita disponer de suficiente energía.Este cambio requiere esfuerzo y constancia hasta llegar a un punto donde ya esté interiorizado. O sea, el nuevo paradigma sustituya el antiguo.

Para facilitar esta tarea y caminar hacia la META que nos hemos marcado, necesitamos estar llenos de recursos para dedicar nuestra atención a llevar a la práctica nuestro plan de acción. Y por lo tanto limpiar el camino de las pequeñas cosas que a pesar de que diariamente soportamos y les damos una mínima importancia, al final del día nos han ido absorbiendo parte de nuestra energía y hacen que estemos menos atentos a nuestro objetivo.

Por ejemplo, aquella bombilla del pasillo, que a pesar de no ser importante, tengo que cambiar porque se ha fundido y precisamente ahora, que me he decidido a emprender el objetivo estoy pensando en que tengo que cambiarla!

O la mesa del despacho que tengo tan llena de papeles y cuando la veo me cambia el humor …. pero me da tanta pereza ordenarla ….

Pues ha llegado el momento de hacer todo esto. Si quiero centrarme realmente en lo que ahora es prioritario para mí (mi objetivo) primero tengo que resolver estas pequeñas molestias y así tener toda mi energía centrada en lo que realmente quiero.

¿Cómo lo puedo hacer?

Puedes confeccionar un listado de las pequeñas tareas que te van absorbiendo energía. Esta lista la puedes clasificar en las diferentes áreas de tu vida, como por ejemplo:

EMPLEO
FAMILIA
CASA
AMISTADES
HÁBITOS

A partir de tu lista, prioriza las más urgentes y realizalas. Esta es una gran manera de poner manos a la obra hacia tu cambio. Una vez has resuelto las pequeñas molestias, tendrás vía libre para centrarte en lo que realmente es importante para ti.